Bueno, aquí está la razón por la que Dios realmente se preocupa.

¿Cómo se puede responder a esta pregunta para convencer a alguien de que Dios se preocupa realmente por la situación de la humanidad? Un enfoque para entender el cuidado y la compasión de Dios hacia la humanidad es quizás el enfoque histórico.

        Cuando pensamos en el enfoque histórico, pensamos en el descubrimiento de documentos arqueológicos que han permanecido dormidos en las arenas polvorientas del tiempo y en los monumentos y artefactos descubiertos en todo nuestro mundo.  La Biblia también contiene información muy antigua que ha sido corroborada arqueológicamente, por lo que se muestra bastante fiable en sus afirmaciones históricas.[i]   No sólo encontramos que la Biblia es históricamente exacta, sino que,  vemos que prácticamente en toda la tierra, tanto en Mesopotamia y en el pensamiento egipcio, hay “un principio básico de la falta de distinción entre el cielo y la tierra”, que la humanidad y lo divino estaban íntimamente entrelazados, como indican Lamberg-Karlovsky y Sabloff en su investigación[ii], con lo que Frankfort está de acuerdo cuando escribe que “las expresiones de una concepción religiosa coherente, proclamando la relación íntima y recíproca del hombre con los animales y más allá de éstos con lo divino.”[iii] Ya que se ha hablado mucho de la historicidad de la Biblia en artículos anteriores de este sitio web, veamos las evidencias históricas que hay en ella sobre la razón por la que Dios realmente se preocupa por la situación del hombre.

        Lucas nos dice que Augusto César hizo un decreto para gravar al mundo en el tiempo en que Cirenio era gobernador de Siria. Esto requería que todos los jefes de familia fueran a sus ciudades a registrarse.[iv]   Al observar todo este episódio de los impuestos y la participación de María y José (figuras históricas, eso sí), y al contemplar el gran amor de Dios por los seres humanos, ¿fué esto significativo? Uno se asombrará de la dirección y supervisión de Dios de este acontecimiento con un tiempo, una ubicación y un significado perfecto para la humanidad y su restauración al favor divino mediante el perdón de sus pecados. El momento es también crucial, ya que observamos cómo la proclamación del nacimiento y el cumplimiento de la profecía convergieron con precisión. Cualquier otra cosa que no sea esto echaría por tierra la validez de las Escrituras por ser inexactas.

        Al nacer en el mundo, Jesús estaba cumpliendo varias profecías. La primera era una profecía de 5 a 6 mil años. Muchos cristianos aceptan que la tierra se acerca a sus seis mil años.  En Génesis 2:17 y 3 15 Dios dijo a la pareja culpable que su pecado traería la muerte eterna sobre ellos, pero que Él, Dios, será el ‘Ira entre’, el ‘el Niño de la Paz’ que estará entre los vivos y los muertos y la plaga de la muerte, la maldición del pecado traída por la rebelión del hombre no sólo se detendría, sino que se pondría sobre Dios mismo (a través de la encarnación) y Él será herido por nuestras transgresiones, magullado por nuestras iniquidades, y nuestro castigo será sobre Él y con sus llagas seremos sanados.  Derramó su vida hasta la muerte, fue contado con los transgresores; llevó los pecados de muchos e intercedió por los transgresores dice Isaías 53.  Amigos, esta profecía de seis mil años se cumplió cuando Jesús nació y posteriormente murió en la cruz.  Fue Augusto César a quien Dios utilizó para cumplir esta profecía. Si Dios no se preocupara por nosotros, ¿por qué haría algo así? Amigos míos, fue su gran amor por nosotros lo que le llevó a ir hasta el extremo para rescatarnos a ti y a mí.  (Pablo utiliza esta hipérbole o expresión para decir que los judíos, al ver cuánta gente acepta a Jesús como su salvador, querrían ellos mismos aceptarlo también).  Luego Pablo termina su pensamiento diciendo, versículo 12, “Ahora bien, si la caída de ellos es la riqueza del mundo, y la disminución de ellos la riqueza de los gentiles, ¿cuánto más su plenitud?” El resto del capítulo 11 es una bellísima representación del amor de Dios por toda la humanidad, tanto por los judíos como por los demás.

        Finalmente, la mayor consecuencia de la imposición del emperador Augusto es esa fiesta que gran parte del mundo reconoce, y que es, por supuesto, la Navidad.  Aunque la historia nos dice que la iglesia católica romana tomó una fiesta pagana y la aplicó a la presentación bíblica del nacimiento de Jesús, esto no descarta el hecho de que Jesús nació efectivamente en Belén para la salvación de toda la humanidad, y que tanto judíos como gentiles tienen la alegría y el privilegio de celebrar esta ocasión.  Esto es un hecho bíblico e histórico.  No es una fiesta católica o protestante, es una fiesta bíblica de Paz, Alegría y Buena Voluntad hacia todos los hombres, un Salvador para los gentiles y para los judíos.  El nacimiento de Jesús, o lo que algunos llaman Navidad, es en realidad la misma promesa de (1) Génesis de 3:15 Es la enemistad entre los hijos de la mujer y los hijos el rebelde, lucifer.  (2) De Números 24:17 Él es la estrella de Jacob. (3) De Deuteronomio 18:15 en los últimos días Dios levantará un profeta como Moisés. (4) De Isaías 7:14 Una virgen concebirá y dará a luz un hijo y lo llamarán Emanuel, que significa Dios con nosotros. (5) De Isaías 53 el portador del pecado que dio su vida para que nosotros vivamos. (6) De Juan 1:29, 36 he aquí el cordero de Dios que quita el pecado del mundo.

        Cada año gran parte del mundo celebra esta fiesta del nacimiento de Jesucristo. Jesús es una figura histórica, hemos explorado esto ampliamente en artículos anteriores; Jesús vivió y murió en Israel; los líderes judíos lo odiaban no por sus buenas obras sino porque afirmaba ser Dios, Juan 10:33.  Hoy la tumba donde Él yacía está vacía; Pilato envió a cien soldados a custodiar Su tumba y lo vieron resucitar el domingo por la mañana. Se nos dice que los líderes judíos sobornaron a los soldados para que le contaran a Pilato la tonta historia de que los discípulos vinieron y les robaron el cuerpo de Jesús.  Este registro del nacimiento, crucifixión y resurrección de Jesús se encuentra en el Nuevo Testamento y en un artículo anterior hemos demostrado que los documentos del Nuevo Testamento están entre los mejores documentos históricos que tenemos debido a que su testimonio es de menos de treinta años en algunos casos de los relatos que se escriben.

        Sí, mis queridos amigos, no puede haber mejor razón para mostrar cuánto le importa realmente a Jesús la humanidad que la total implicación de Jesús en los asuntos de la humanidad para restaurarnos a la imagen divina de Dios, eliminar nuestros pecados y hacernos de nuevo ciudadanos del universo de Dios.  Que este artículo y esta Navidad te ayuden a cruzar la línea y echar tu suerte con los ciudadanos del reino eterno de Dios, todo ello gracias al decreto de Augusto César en los años finales de la historia antigua tal y como Dios lo quiso para la humanidad.  Feliz Navidad.

[i] David Marshall, La batalla por el libro, (Alma Park, Grantham, England: The Stanborough Press Limited for Autumn House Publication, 1991), 9, 10, 17,18, 44-49, 56-60.

[ii] C. C. Lamberg-Karlovsky and Jeremy A. Sabloff, Civilizaciones Ansestrales: El Medio – Oriente y Mesoamerica, (Menlo Park, CA: Benjamin/Cummings Pub. Co., 1979), 4.

[iii] Henri Frankfort, El nacimiento de la Civilización del Medio – Oriente, (Bloomington, IN: Doubleday, Doran & Company Inc., 1953), 33.

[iv] Lucas 2:1-4 menciona que este acontecimiento sucedió durante el reinado de Quirinius. Historicamente, sin decir los detalles, se muestra que había un impuesto durante el tiempo de Quirinius alrededor de 5 /4 AC. Para una referencia rápida, se puede ver en el artículo “había realmente un censo durante la época de Cesar Augusto? –  (crossexamined.org).”

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