Pero… ¿es ésto un “déjà vu”?

        En mi carta del mes pasado vimos la intensidad del mal tomando lugar en nuestro mundo. La corrupción política en muchos gobiernos de las llamadas “repúblicas bananeras” hasta los gobiernos aparentemente sofisticados de Occidente, también es descarada, cruda y secreta.  Casi nadie está libre de ella. Los disturbios, la mafia, la impactante negligencia por los ancianos, la remoción de la identidad de género masculino o femenino al nacer por gobiernos que deberían “saber mejor”, la destrucción deliberada de la identidad de género de nuestros hijos promovida por varios gobiernos del ‘primer mundo’ y el deseo de hombres y mujeres para casarse con quien elijan, independientemente de la distinción de género, y la desconcertante intolerancia de los puntos de vista del otro. superan cualquier intento de lidiar con lo que algunos llaman Cambio Climático. Si continuamos por el camino en el que estamos yendo, con tanto odio mutuo y con la destrucción de la identidad de género al nacer, todos podríamos ir a la tumba antes de que suceda un peligro mortal para nuestro clima.  

        Algunos se preguntan si ya hemos estado allí antes, si ésto es un “déjà vu”.   Según el diccionario, “déjà vu” se debe a procesos fisiológicos y psicológicos en nuestro cerebro que producen la sensación de ya haber estado en un lugar, visto o escuchado un evento o serie de eventos antes.  Por lo tanto, aunque usted y yo tengamos la sensación de “haber estado allí,  o ya haber hecho algo antes”, esto es sólo una ilusión, sólo hemos experimentado un “déjà vu”. Sin embargo, existe la legitimidad de que muchos de nosotros hemos estado allí y lo hemos hecho antes.  Ya lo dijo el sabio una vez, “no hay nada nuevo bajo el sol”. Eccl.1: 9. Las experiencias pasadas están ahí para ayudarnos a repetirlas si fueron agradables y útiles, o para evitarlas si son dañinas e inútiles.

        Amigos, tengan en cuenta esto. Es posible que usted y yo no hayamos estado allí antes cuando vemos la intensidad del mal que tiene lugar hoy en nuestro mundo, pero nuestro planeta ha estado allí antes y permanece, resquebrajado como está, como testigo de todo esto.  Vean, hubo una vez que nuestra tierra disfrutaba de una belleza y armonía exquisitas.  Debido a la rebelión contra su Creador por parte de dos habitantes de la tierra, los dos curadores de la tierra que cayeron en la misma rebelión, cayó la intolerancia, dominio de la mafia, perversidad hombre-mujer, asesinatos, guerras y todo lo demás que estamos presenciando hoy en nuestras sociedades! Todo se debe al pecado. Y el pecado se define como la anarquía, la rebelión contra las reglas de compromiso para una vida feliz y armoniosa en la tierra dada a los humanos por el Creador. Entonces, lo que estamos presenciando hoy en nuestras sociedades no es nuevo, es una repetición del comportamiento de aquellos que nos precedieron.  Veamos algunas eventos de esto en el mundo que alguna vez fue. Encontramos este relato en la Biblia.

        Encuentra en tu Biblia el libro de Génesis, capítulo 6 versículos del 1 al 8 (Genesis 6:1-8). Estos versículos nos dicen que después de que el pecado entró en este mundo, Véanse Génesis capítulos 3 y 4)(Gen. 3 and Gen. 4), y la humanidad comenzó a poblar la tierra, estos pueblos antigϋos eran de personas gigantes y se dividieron en dos grupos, los que amaban a Dios y los que habían rechazado a Él y a Su reglas para vivir. Desafortunadamente, llegó un momento en que ambos grupos comenzaron a fraternizar y el grupo de Dios se unió a los impíos y se casó con sus hijas e hijos. La Biblia dice que las hijas de los hombres eran hermosas (La palabra hebrea es “tov” y veremos esa palabra en otra carta.) y los hijos de Dios se casaron con los hombres y mujeres impíos.  Cuando esto sucedió, toda la humanidad, con pocas excepciones, comenzó a rechazar totalmente a Dios como su Salvador y Creador, a El, quien les había dado buenas leyes morales para vivir.  

        A medida que los hombres y mujeres piadosos continuaron casándose con los impíos, toda la tierra eventualmente se volvió corrupta, malvada y violenta. ¿Pueden imaginarse de qué se trataba todo esto? Quizás nunca sabremos todo el mal que estas personas que vivían muchos años, hacían.  Sin embargo, la Biblia nos dá algunas indicios de lo que sucedió.  Antes de mirar ese pasaje en el Nuevo Testamento, reflexionemos sobre lo que sucedió. La gente piadosa se casó con los impíos y pronto el mundo entero se corrompió.  Los hombres rechazaron totalmente a Dios y cayeron en todo tipo de acciones y prácticas malvadas.  ¿Cuál es el mensaje para la gente de hoy? ¿No es cierto que cuando uno deja las instrucciones de Dios y se une a aquellos que ignoran a Dios, eventualmente terminarán dejando por completo una relación productiva y activa con Dios?

        El proceso comienza muy sutilmente, comienzan a hablar de Dios cada vez menos en el hogar, dejan de asistir con frecuencia a los servicios de adoración hasta que dejan de asistir completamente.  La influencia restrictiva de la piedad desaparecía cuando se casaban con los impíos, y sin esta restricción piadosa, no había conciencia piadosa, ni “voz interior” que guiara a los hombres a hacer el bien. El mal comenzó a asentarse en los corazones de hombres y mujeres, y la propia imaginación de sus pensamientos se volvió malvada “continuamente”, según la Biblia.

        Amigos, ¿no es esto similar a lo que estamos viviendo hoy? ¿Es posible que los asesinatos en masa, la violencia, las violaciones, la intolerancia de los puntos de vista de otros, las corrupciones en gobiernos y personas, la inmoralidad y la sexualización excesiva de la sociedad, el comportamiento homosexual agresivo de los gobiernos, hombres y mujeres, y ahora la eliminación de identidad de género en el parto, podrían ser exactamente lo que practicaron los antidiluvianos y lo que provocó su destrucción total? (Vea mi página web sobre esta inundación global: https://hangonthebestisyettocome.com/what-the-bible-says-about-bible-studies-5/the-flood-did-it -really-happen/).

        Sí, amigos, esto es exactamente lo que ocurrió antes de la destrucción del primer mundo. Y hoy estamos repitiendo el mismo comportamiento. No es un déjà vu, mis amigos. Es real. ¡Sucedió antes y casi destruyó todo! Incluso la ciencia reconoce un momento en que la humanidad estaba casi aniquilada; ver: https://www.researchgate.net/publication/279723381_Volcanic_winter_in_the_Garden_of_Eden _The_Toba_supereruption_and_the_late_Pleistocene_human_population_crash. Hablaremos más sobre esto en otra carta.  Esto es lo que dice la Biblia sobre este comportamiento perverso en el pasado. Por favor lea Rom.1: 20-32. Este pasaje nos dice que al crear el mundo, Dios dejó evidencia de su obra creadora.  Estas evidencias fueron cosas como el diseño, la belleza, el ADN, las leyes de la naturaleza y el universo, las complejidades irreductibles y mucho más. Sin embargo, a pesar de estas evidencias de la existencia de Dios, la humanidad se hundió en una rebelión tan baja contra Dios que El tuvo que destruirlos para preservar la tierra y los pocos fieles que quedaban.  Sólo había ocho personas justas entre aproximadamente dos o tres mil millones de personas que existían en ese momento, según algunos demógrafos.  

        En Judas (Jude 1: 5-7, 14, 15) está claro que hombres y mujeres en el pasado practicaron estos actos malvados y en consecuencia fueron destruidos, y aquellos que continúan el mismo comportamiento hoy también serán destruidos.  En 2 Pedro ( 2 Pet. 2: 4-9; y  2Pet. 3: 3-7)  nuevamente leemos que los antidiluvianos fueron destruidos debido a su rebelión contra Dios.  Entonces, mis amigos, el mal y la maldad que estamos presenciando hoy en nuestras sociedades no son nuevos, tuvieron lugar en el pasado y como consequencia muchos fueron destruidos.  

        Mi llamado a cada uno de ustedes hoy es hacer las paces con vuestro Creador. El es un Dios amoroso y amable. Él envió a Jesús al mundo a morir por nuestra maldad para que, a su vez nosotros nos podamos confesar nuestros pecados pasados, arrepentir y caminar una nueva vida en Jesús. Te animo a que no pospongas esta decisión, mañana puede ser demasiado tarde. Independientemente de lo malvado que hayas sido, o de las cosas que habrías hecho, Jesús vino específicamente por esas acciones, para eliminar nuestros pecados y atraernos una vez más a la familia de Dios. Que Dios te bendiga mi hermano, mi hermana. Planifiquemos estar allí.  

        En mi próxima carta a la gente del mundo, veremos el término ‘justo’ (hebreo, ‘tov’) en Gen. 6: 2 que condujo a la destrucción del primer mundo por una inundación y cuáles son las implicancias para los humanos de hoy.

Si tiene alguna pregunta, comuníquese con Pr. Ron en ronhende@outlook.com

Créditos a Sara Chávez por ayudar con la traducción al español.